La sinceridad es un espejo; los falsos siempre tienen dos caras.
Quien sonrie con la boca, pero hiere con el alma, es el rey de la hipocresia.
Las palabras de un falso son como espejos rotos: reflejan lo que quieren, pero no la verdad.
Detras de una sonrisa, a veces se oculta una traicion disfrazada.
En un mundo de mascaras, pocos tienen el valor de mostrarse sin disfraz.
Tu lealtad es falsa si en tu corazon hay dos caminos.
Las amistades envenenadas llevan dos etiquetas: ‘falsa’ y ‘traicionera’.
Hay quienes te abrazan con una mano y te apunalan con la otra.
La verdadera cara de la hipocresia siempre se revelara con el tiempo.
Cuando el viento sopla, las caras falsas se desvanecen como el humo.
Las doble caras nunca ganan en el juego de la vida.
La traicion se esconde detras de las risas mas brillantes.
Ser falso es como beber veneno y sonreir por fuera.
Un abrazo de dos caras puede ser mas frio que el invierno.
Las palabras amables de un falso son solo un dulce veneno.
Las verdaderas amistades no llevan etiquetas de hipocresia.
Al volver la cara, el falso se encuentra con su propia sombra.
Las sonrisas forzadas son el disfraz de las intenciones ocultas.
Quien se vende como amigo, pero actua como enemigo, tiene la cara cubierta.
En el teatro de la vida, los falsos son solo actores sin futuro.
La verdad no necesita de dos caras para brillar.
Prefiero la verdad desnuda a la dulzura envenenada de un falso.
Un beso en la mejilla puede ocultar el punal en la espalda.
La autenticidad se siente; la falsedad se ve.
No confies en el que habla mal de otros; su lealtad es una tela de arana.
Una sonrisa puede ser el abrigo de una fria traicion.
Los falsos son artistas en el escenario de la vida, pero nunca ganan el Oscar.
Las cartas se descubren en el momento menos esperado.
La hipocresia se siente en el aire como un perfume rancio.
Quien tiene doble cara nunca camina con firmeza.
Las traiciones siempre llegan disfrazadas de amistad.
En el juego de la vida, los verdaderos actores no llevan mascara.
La belleza de la sinceridad eclipsa al brillo de la falsedad.
La traicion es un boomerang que siempre vuelve a su lanzador.
Ser genuino es el mejor antidoto contra las dos caras.
Detras de cada falso hay una historia de inseguridad.
Las mascaras caen con el tiempo, revelando el verdadero rostro.
En la danza de la vida, mejor ser un bailarin autentico que un espectro falso.
La traicion es una sombra que nunca se aleja del falso.
Las palabras pueden enganar, pero el silencio es el verdadero revelador.
Un amigo con dos caras es como un libro con paginas en blanco.
Quien adula con palabras vacias, construye puentes hacia la traicion.
La lealtad no tiene forma; la falsedad, si.
Las manos de un traidor pueden ofrecerte dulces, pero son venenosas.
En el laberinto de la amistad, los falsos son los que nunca encuentran la salida.
Una sonrisa es solo una mascara; la mirada es la verdad.
La amistad verdadera no necesita de dos rostros.
Un falso te muestra lo que quiere que veas, pero nunca la realidad.
Donde hay dos caras, la confianza se convierte en ceniza.
Mejor ser un lobo solitario que un cordero disfrazado de amigo.
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